Roberto x Jose Luis

Han pasado unos cuántos meses desde la entrega del tarjetón en Voramar.
Sabía que lo que había ocurrido ese día era un avance de la fiesta que nos esperaba el día de la boda, pero no pensé que se trataría de algo que me sobrepasara tanto. IMPOSIBLE permanecer en la postura de observador. Fue todo muy emocionante, imaginaos lo que supuso para los amigos que crecieron con ellos, o para su familia.

Algunas veces sucede, que el ambiente de un evento es tan inmenso que se apodera de todo. En la primera reunión, nos dejaron claro que en su boda, los invitados eran los que tenían que ser, y éstos demostraron con su cariño hacia los novios y complicidad con el resto de asistentes, que era una boda única.

Creo que las fotos cuentan mejor todo lo que trato de explicar. Si buscáis una fiesta 10, seguid el ejemplo de Roberto y Jose Luis: un montón de amor verdadero, la bandera del orgullo gay sin complejos, Ironman, lágrimas de felicidad, una dixie band… envuelto en el jardín de la Masia Les Casotes, al aire libre y con bombillitas colgadas.

¡Vivan los novios!!
¡Viva!