¿Pero quién es Amanda?

Varias personas nos preguntan a santo de qué viene nuestro nombre, los mails los escriben dirigiéndose a ella o cuando contesto al teléfono me dicen: “Hola Amanda”. Existe un post explicando quién soy, hoy contaré la historia del nombre y de la marca. Es bastante largo pero no me quiero dejar los detalles.

AMANDA LA DREAMHUNTER

Llegó un día que los planetas se alinearon con las estrellas y tuvimos una epifanía: una empresa que uniría Carmen Córder, diseñadora y Aitor Aranda, fotógrafo, para enfrentar el futuro con armas renovadas. La unión hace la fuerza, fijaos en los X-Men. Los proyectos que habíamos hecho juntos no tenían ningún cliente, solía ser experimentación propia, por eso les poníamos algún tipo de nombre propio (como los sistemas operativos de los ordenadores) Nocturna, Medusa, Travelling, Callejeros, etc. La nueva empresa también: sería el “Proyecto Amanda”.

OK, nos ponemos en marcha. Hay que buscar un estudio dogfriendly y decir bye bye al de casa tras una productiva relación de cuatro años. Mientras, también debemos pensar en el nombre para comprar el dominio y empezar con la identidad corporativa. Es agosto de 2011.
Cómo describes lo que haces o quién eres en una frase. ¡Uf! hacemos muchas cosas, ¿cómo reducirlo? Un estudio creativo de qué, diseño se queda corto porque no sólo diseñas, también ilustras y asesoras a nivel de imagen. ¿Fotografía? Sí, pero la fotografía que haces también va en una línea alternativa, a medio camino entre publicitaria y el reportaje documental, depende del encargo. Mmmm. La primera propuesta fue “branding y fotografía creativa” pero evolucionó a “diseño y fotografía creativa”, me sentía más honesta y aunque limita a dos cosas muy concretas, es lo que soy. Falta el nombre, pero ahí estaba el problema y la solución.

Nos referíamos a Amanda cuando planificábamos todo así que no podía llamarse de otra manera, ya se había hecho un hueco en nuestros corazonciLios. OK. Ahora hay que buscarle pegas y descubrir sus fortalezas: El significado de Amanda es muy bonito: la que es amada por todos; su personalidad se describe como inteligente e intuitiva, conversora de la fantasía en realidad, mejor si es a través del arte. Si esto no es una señal… Ambos estamos de acuerdo en que nos gusta que sea un nombre de mujer y que da igual el idioma, se pronuncia igual. Pega: que en primer momento se pensará que se trata de una persona llamada Amanda y hay muchas Amandas, existe una canción muy conocida y dejaríamos de ser Aitor y Carmen. No hay problema. El destino nos lo ha dicho.

Al tratarse de un nombre propio podría integrar uno de los conceptos a nivel naming del que estoy más orgullosa: “el dreamhunter”. No quería desprenderme de él, es redondo, define el proceso de trabajo: un objetivo feliz o bonito que buscas así: preguntas, observas, deduces, investigas y partes a la caza fiándote de tu instinto. ¡Buf! Heredado de la identidad corporativa de Aitor Aranda, fotógrafo y dreamhunter. Si bien en la suya no pudimos dejar sólo esa palabra (necesitaba el “fotógrafo”), con Amanda la elevaríamos a un lugar más importante, ella sería la Dreamhunter.

LA MARCA

Éstas son las tres propuestas para la marca.
Por el nombre, una de las primeras asociaciones que viene a la mente es la del dreamcatcher (no recuerdo si me estaba leyendo Crepúsculo y eso influyó también), una idea que barajé para “Aitor Aranda” pero él prefirió una opción de logotipo. Siempre me han gustado las marcas que combinan símbolo con logo, si es una forma bonita da mucho juego.

A la hora de diseñar primero boceto en papel y a lápiz, rotulador o boli. Con los seleccionados me paso un rato eligiendo las tipografías. Por supuesto, como vengo de gráfico siempre voy a preferir una familia completa (regular, itálica y bold), con eñes y tildes. Al trasladarlo al ordenador lo hago en negro, es cómo lo veo mejor. Soy bastante previsible y sí, adoro la Helvética.

En la 2ª propuesta el concepto de atrapasueños evoluciona a algo más romántico: el cazamariposas. Es otra vuelta de tuerca, Amanda lleva una herramienta inofensiva que sirve para perseguir o cazar, Amanda es activa, va a por ello.

La 3ª propuesta es un globo con forma de corazón con las letras escritas a mano. Algo infantil, femenino, soñador y con alma resulta muy atractivo. Y le pega al nombre.

Las sometemos a la dura votación entre dos personas, en la que cada uno se decanta por una. No queda más remedio que pulir un poquito las dos marcas elegidas (cazamariposas y corazón).

Finalmente nos quedamos con el globo: toda la fuerza del nombre escrito a mano dentro de un corazón no muy definido; una tipografía clásica, con personalidad y fuerte equilibra el peso; el color bronce te lleva a una época romántica, donde no se ve en blanco y negro sino en sepia.

Aquí tenéis la personalización de la marca para diferentes tipos de trabajos que tenemos en el estudio: Gráfico e Ilustrador no requieren explicación; Brand es para asesoría. El resto son las líneas de fotografía: Blossom: bebés y niños; Nupcial: bodas; Mirror: retratos y Alter Ego: Perros